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viernes, 14 de diciembre de 2018

Diciembre de 2018:Cinco meses después

   El tiempo pasa, las rutinas empiezan con un desayuno servido en los primeros meses.A quien le importa mi desayuno,ya han pasado semanas en que lo preparo personalmente y aguanto de pie,me muevo sin la sensación de irme al suelo mientras frunzo el ceño y saco fuerzas para aguantar.Me sorprendo con tres aparatos enchufados a la red eléctrica:la tostadora para el pan con cereales,la maquina de Nespresso para el descafeinado y la máquina  niquelada con asa para calentar la leche.

   Conseguir hacerme dueño de mi desayuno ha sido duro,conseguir ese espacio y tiempo ha supuesto que se confiara en mis posibles poco a poco,dependo de mi y se confia en mi.

   La secuencia es indistinta y lleva un rato al que se añade preparar la bandeja con la servilleta y las pastillas de aspirina y lansoprazol.El azucarero y el plato con las tostadas y casi llegamos al final,pero hay que poner el aceite de la chinata a la tostada antes de pasar a la mesa y desayunar sentado.

  Tomar la tostada y el café es lo que menos tiempo lleva y recoger la taza ,el plato,limpiar la máquina de la leche una vez desenchufada y recoger la tostadora una vez desenchufada y limpiadas las migas es bastante rápido.

   La Intendencia ha sido otra ganancia en el devenir de los días,una incursión a Nespresso implicaba una caminata solo,cuando siempre salía acompañado,lo mismo una búsqueda del pan en rebanadas con cereales en el suermercado o a la tienda de la esquina a por leche.

  Las salidas de casa han sido acompañadas durante las mañanas y las tardes noches del verano,al principio una vuelta a un par de manzanas y a esperar al técnico del ascensor por avería en una de las primeras salidas,esperando sentado en un banco del parque y no pasó nada raro.

   Desde la intervención y hasta ahora en que se han empezado a distanciar he tenido migrañas con aura de visión imprecisa al menos dos veces por semana.Son conocidas,no su frecuencia que me ha preocupado,pero si su inocuidad,en media hora se pasan del todo y vuelvo a ver bien.Han ido cambiando de izquierda a derecha,casi alternando y por una vez una extraña que empezó por la derecha y acabó por la izquierda o viceversa. Debe ser buena señal para la organización de la circulación cerebral la distancia entre las migrañas, que no tienen porque desaparecer.Otro dato favorable para el flujo sanguineo es la remisión de los pitidos de oidos,los tinnitus,de las primeras semanas,que a ratos eran muy intensos y ya no dan mucha faena o son mas tolerables,puede que se escuche uno algo de más,son sensaciones las oculares y las acústicas que ya las conocía y las llevo bastante honorablemente.

   El tiempo esta ahí y las antirutinas se iniciaron con una comida en el restaurante Larruz con las chicas del curro,de momento solo tres,con entrantes de sepia y arroz a banda.Tras repasar nuestras vidas pasamos un rato muy agradable.Una semana después y tras mi primera revisión de neurología nos dimos mi chica y yo una comida en el nuevo restaurante del hotel Meliá,en el último piso y donde os recomendamos los rulos de carrillera.

   Las antirrutinas han continuado con una comida con las chicas de trabajo,todas y alguna más, en la taberna del gourmet.Encantadoras,con ganas de vernos,quedamos encantados.Posterirmente una cena con tres compañeros y entre medias una comida de sábado con mi familia en Altea,en Ca de Joan y otra comida de domingo con otros tres compañeros y sus esposas en el Bon Sol de Campello.Mi primer fin de semana socializado.Y antes de que se inicien las fiestas con mi chica, en Urbanova, en El Momens, recomendamos pulpo a la brasa,mollejas y pechugas de perdiz...superadas las comidas habrá que ponerse en guardia o se recuperará todo el peso perdido en estos meses en las fiestas.